SRI homologados

La normativa aplicable a la seguridad infantil, da lugar a que existan diferentes tipos de sistemas de retención infantil (SRI o “sillas”) homologados: unos orientados en el sentido de la marcha y otros, en sentido contrario.

La silla, por tanto, siempre debe estar homologada. Llevará una etiqueta de color naranja, situada normalmente en la parte trasera de la misma, para garantizar que ha sido homologada después de haber sido sometida a una serie de pruebas como choques frontales o laterales, lo que avala su seguridad y fiabilidad.

Existen 5 grupos de SRI diseñados para adaptarse al máximo tanto al peso como a la estatura de los más pequeños, y se clasifican, de este modo, en función de las características andropométricas del menor, siendo el peso el factor fundamental.

Grupo 0: desde que el bebé nace hasta aproximadamente el año de vida, es decir, hasta los 10 kilos de peso. Suele identificarse con un capazo con arneses que se situará en el asiento trasero, en el sentido contrario de la marcha, acoplado con los cinturones de seguridad del coche.

Grupo 0+: amplía la edad y el peso, hasta los 18 meses y los 13 kilos. Irá en el asiento trasero en sentido contrario a la marcha, también ajustados con los cinturones de seguridad del vehículo.

Grupo I: para menores entre los 9 y los 18 kilos y de edad entre 1 y 4 años. Estas sillas ya se colocan en el sentido de la marcha, también en los asientos traseros y acoplados con los cinturones de seguridad del vehículo.

Grupo II: especialmente indicados para niños de 3 a 6 años, de entre 15 y 25 kilos. Ya los menores utilizarán el cinturón de seguridad como los adultos pero arropados por un asiendo elevador con respaldo que les protegerá mejor.

Grupo III: se trataría de una evolución del Grupo II; un modelo cojín elevador para niños de 5 a 12 años y peso entre 22 y 36 kilos.

Desde aquí nos sumamos a las recomendaciones de la Fundación CEA recordando que "es responsabilidad de los adultos que los niños siempre lleven los sistemas de retención infantil para garantizar su seguridad. Los niños aprenden por imitación, por lo cual siempre deben mostrar el ejemplo del uso del cinturón de seguridad."

Por cierto, nos ha encantado la guía de la DGT Dirección General de Tráfico con recomendaciones acerca de la seguridad infantil cuando los menores viajan en el coche.

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